Si bien Cars es la segunda franquicia del prestigioso estudio de animación Pixar en obtener una secuela cinematográfica, he de confesarme por completo escéptico con el posible resultado de la cinta programada a estrenarse hacia finales de junio del año entrante.
Siempre he considerado que la cinta original, estrenada en 2006, ha sido el mayor descalabro creativo del mentado estudio californiano por tratarse de una película francamente efectista carente de personalidades entrañables, construida sobre un guión vacio, falto de de intensidad dramática y dinamismo alguno. Su único acierto, sin embargo, lo obtuvo en la recaudación monetaria en donde logró superar los 460 millones de dólares gracias a que se mantuvo en la estela del prestigio pasado y en el gusto del público americano naturalmente conducido hacia el fanatismo automovilístico.
Más allá de la necesaria producción de éxitos taquilleros bajo el sello Disney, lo realmente trágico es que su elevado financiamiento conduzca al patíbulo a ideas nuevas y proyectos frescos (Newt por ejemplo).
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1 comentario:
Comparto la misma idea que tu con respecto a esta película, me parece la trama de la historia no tiene un desarrollo lógico y no hay una personalidad determinada para los personajes, además, la idea de utilizar carros vivientes, no esta nada bien desarrollada, ya que hay muchos huecos no explicados acerca de la constitución de este tipo de "vida".
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